viernes, 26 de agosto de 2016

26 DE AGOSTO

Hoy nos pegamos un buen pateo. Y eso que hace un calorín parecido al de nuestra tierra.

Vamos primero a la CATEDRAL DE ST. PAUL, aunque no entramos porque es carísimo entrar, y estamos haciendo la ruta "Londres para tiesos". El jardín esta ambientadísimo, hay mucha gente comiendo tumbada en el césped, aprovechando el buen tiempo que hace. ¡Anda que en Sevilla lo iban a permitir!.



En la puerta de la Catedral hay un grupo de música clásica tocando, y la gente se sienta en la escalinata a escuchar.


Cruzamos la calle y entramos en la oficina de Turismo, a ver qué folletos hay de actividades que se puedan hacer. Seguimos hacia GODIMAN ST., una calle peatonal que desemboca en el PUENTE DEL MILENIO, obra del arquitecto Richard Foster.


El Támesis está muy bajo, y se han formado como unas playas de guijarros en las dos riberas, donde la gente pasea y coge piedras. Nos sigue impresionando el agua del río, que es un barrizal. El puente es precioso, peatonal, con unas vistas magníficas. Por un un lado la cúpula de la Catedral...


...Y enfrente la fachada industrial y modernísima de la TATE MODERN.



Miguel se queda tirado en el cesped mientras nosotras vamos al servicio de la Tate y vemos una expo de Georgia O'keeffee, una de las máximas representantes del arte moderno estadounidense desde 1920. A mí no me interesa mucho la obra, unas enormes flores de vivos colores, pero siempre es interesante ver el montaje de estas grandes exposiciones. En una vitrina tiene los libros de lectura de la artista, dedicados por sus amigos escritores. Hay muchas fotos de ella en blanco y negro, algunas son desnudos artísticos.

A la salida nos asomamos a la terraza, desde la que hay unas vistas fantásticas de Londres.



Desde esta terraza vemos a Miguel en el césped, está hablando con un señor mayor, luego nos cuenta que no sabía si era un traficante de drogas italiano, aunque tenía un aspecto de abuelete de lo más normal.

Seguimos por la ribera nos dirigimos hacia el SHAKESPEARE GLOBE THEATRE.



Aunque Shakespeare nació y murió en Stratford-upon-Avon, vivió varios años en Londres. Sus obras se representaron en un teatro igual que este, aunque fue demolido en 1644 (Shakespeare había muerto en 1616). En 1993 empezó la reconstrucción del edificio, que abrió sus puertas en 1997 bajo el nombre de Shakespeare's Globe Theatre. El recinto es una reproducción fidedigna de un teatro del siglo XVI.

Antes de llegar vimos a los invitados a una boda, que esperaban la salida de los novios de un restaurante. Las damas de honor iban vestidas de rosa, bastante cursis a mi modo de ver, y los padrinos con las corbatas de la misma tela y color, idem. Pero lo que más nos llamó la atención fue algún que otro invitado vestido de escocés, con unos calcetines gordos de lana hasta la rodilla, a pesar del calorín que hacía. Tendrían los pinreles achicharraos, los muchachos.

Callejeamos en dirección al BOROUGH MARKET,  pasamos por una iglesia de la que únicamente se conservaba la fachada, con un gran rosetón.


En el mercado compramos la comida que más nos apetece, de la inmensa variedad que existe, y nos la comemos al lado de una réplica del Galeón de Sir Francis Drake (competencia de la Nao Victoria, según nos asesora el grumete Miguel).



Después cruzamos el puente, cogemos en metro y nos bajamos frente al museo Victoria and Albert para ir andando hasta Harrods, aunque antes no podemos resistir la tentación de entrar en un Charity de superlujo (aunque muy barato también) que sale a nuestro encuentro, con ropa de Armani y otras marcas por el estilo.

HARRODS es inenarrable. Entramos por la parte de la carnicería, con sus azulejos modernistas de pavos reales.

Pero la escalera de estilo macarrónico-egipcio con la escultura de Diana de Gales y Dodi al Fayet volando hacia el más allá nos deja sin palabras. Superado el susto, paseamos por algunas plantas viendo las cosas tan carisimas que venden, y a los árabes con pasta comprando como si no hubiera un mañana. ¡Donde se ponga un Charity!

Nos vamos hacia la zona de Belgravia, y vemos en la trasera de los almacenes los cochazos aparcados con los chóferes dentro, algunos tienen un pinganillo en la oreja esperando que los avisen para recoger a los señorones. Cada vez que viene un guardia arrancan, aunque los coches son muy silenciosos.



Vamos por Sloanes street, llena de tiendas caras, y por Lowndes square donde se repiten las escenas de los coches. Allí vemos a unos chavales de la edad de Miguel con una bolsa grande de Gucci. En una zona de casas de esas que tienen un jardín enfrente vemos cochazos aparcados, uno tras otro, brillantes y con los cristales tintados, y en una cafetería un montón de chóferes tomándose un té mientras esperan el aviso.

Pasamos por la Embajada de Francia. Hay una manifestación a favor del burkini, una especie de burka que usan las mujeres para bañarse en la playa, y que en Francia lo han prohibido.

Nos metemos en HYDE PARK, lleno nuevamente de árabes, muchas mujeres con burka en grupitos charlando animadamente. Nos tiramos en el césped a tomarnos un té mientras vemos el espectáculo de gente tan variopinta.

Hay muchísima gente navegando con unos botes de remos y con unos monopatines por el lago SERPENTINE. El Serpentine en realidad era una represa del río Westbourne, que en 1730 formaba ocho pequeñas lagunas naturales en el parque. Actualmente, sin embargo, el lago es llenado con agua bombeada desde el Támesis, ya que debido a la contaminación del Westbourne, se dejó de proveer agua al lago en 1834. Se llama así porque tiene una forma curvada, parecida a una serpiente.

Detrás nuestra hay un grupo de mujeres árabes muy arregladas, con sus túnicas ¡de Chanel!. Vemos a otra que lleva una especie de máscara de metal dorado en la cara, tras mucho pensar imaginamos que será algo para que el velo no se le pegue demasiado a la nariz y a la boca.


Decidimos volver a casa atravesando el parque, así que nos vamos siguiendo la orilla del Serpentine. Cruzamos un puente precioso, donde un chico toca una especie de laúd a los cisnes.


Nos topamos con el MEMORIAL DE DIANA DE GALES, que es una fuente circular donde hay muchos niños bañándose.



Siguiendo hacia Kensington Garden vemos unas esculturas enormes y muy modernas. Es la GALERÍA DE ARTE SERPENTINE. Sus exposiciones tienen que ver con la arquitectura y la educación. Cada año la Serpentine Gallery selecciona a un equipo de arquitectos de fama internacional para diseñar un pabellón en los jardines, como una pequeña muestra práctica de la arquitectura contemporánea.



Pasamos por el monumento a Peter Pan, ya que Kensington Garden inspiraron al autor, J.M. Barrie, para empezar la historia de este personaje. La estatua está en el lugar exacto en el que Peter Pan "aterriza" por primera vez en la primera versión, y fue colocada allí por el propio autor en secreto una noche, ya que le fue denegado el permiso para poder colocarla.

Un poco más adelante vemos LOS JARDINES ITALIANOS, que es el lugar donde nacen los lagos que dividen Hyde Park y Kensington Garden. Eran parte de una finca de caza de Enrique VIII (que además de cargarse a sus siete esposas, tenía tiempo el hombre de cazar). Fueron agregados al parque en 1860. Tiene cinco estanques octogonales con fuentes de mármol y barandillas. Fue copiado de uno similar que había en Versalles y en un principio contenía una bomba para llevar el agua desde un pozo hasta los lagos LONG WATER y THE SERPENTINE.

Ya estábamos casi en Galway rd. cuando escuchamos en la calle un estruendo, y salimos del parque para ver qué era, una gran concentración de ciclistas llenaban la calle con música.

En casa vemos la película "Notting hill", para poder reconocer al día siguiente las calles por las que vamos a pasar.